Repetir victoria en una gran carrera siempre es complicado y a la vez bonito, pero portar el maillot arco iris durante dos años seguidos, debe ser una de las cosas más increíbles para un ciclista profesional. Esto fue lo que le ocurrió a Gianni Bugno (1964, Brugg) en 1992. Benidorm era la cita, el mundial llegaba a la casa de la figura del momento y uno de los nombres que van ligados (por suerte o por desgracia) al “Lagarto”. Ese nombre no es otro que el de Miguel Indurain.
Se había hablado de que el puerto de Finestrat sería el juez de la carrera, pero finalmente no fue del todo así. A falta de dos vueltas, Miguel atacó en el propio Finestrat y propició un corte muy importante pero no definitivo. Los ciclistas que formaban el grupo aparte de Miguel, eran Laurent Jalabert, Tony Rominger y Claudio Chiappucci, pero eran cazados a la entrada de Benidorm. Gianni Bugno también lo intentó a falta de dos vueltas para el final, pero el buen trabajo de ‘Perico’ Delgado hizo que fuera neutralizado.
Ataques importantes en la última vuelta de Bugno, Jalabert o Leblanc que fueron también inconclusos. Los ciclistas se preparaban para una llegada al sprint en la que Jalabert parecía superior a los demás ciclistas, pero en un mundial con tantos kilómetros y desgaste, el sprint puede ser imprevisible. El gran trabajo de Giancarlo Perini para su compañero Gianni Bugno, hizo que el italiano se vistiera por segunda vez consecutiva de arcoiris ganando a Laurent Jalabert, plata, y Dmitri Konyshev, bronce.
http://www.youtube.com/watch?v=-HQwucBvaYE
Para Bugno el mundial conseguido en Benidorm significaba salvar un año gris. Un año lleno de críticas por su no participación en la carrera de casa, el Giro de Italia. Para Indurain, el Finestrat, no fue lo bastante duro como para romper la carrera y tener más opciones de victoria. El navarro comentaba al término de la carrera: “Cuando a dos vueltas del final he atacado, lo he hecho con la intención de descolgar a los hombres rápidos”.
Por el contrario Gianni, siempre con buenas palabras para Miguel, comentaba: “en cierto modo me disgusta ganar en el país de Indurain, por que es el mejor corredor del mundo, pero para mí era muy importante vencer”. El doblete de Bugno cobra aún más importancia con el paso del tiempo. Los nombres capaces de repetir victoria dos años consecutivos en un mundial son de ciclistas de la talla de Georges Ronsse, Rik Van Looy, Rik Van Steebergen y Paolo Bettini.
20 años después de su victoria, se valora aún más lo conseguido por el bueno de Gianni. Un idilio con una carrera especial, un idilio con el mundial para una figura elegante, dentro y fuera de la bicicleta. Un ciclista con una enorme clase, que pese a estar a la sombra del gran Miguel Indurain, caló muy hondo en todos los aficionados a este deporte por este y otros grandes momentos.