Hay que estrujarse la cabeza para sacar ideas de las que hablar tras una etapa como la de hoy. Ni viento, ni caídas, ni tan siquiera demasiada tensión hasta los diez kilómetros finales. Se sigue hablando de cascos (hoy se sumaron a la moda los Garmin), aunque empieza a escasear el ingenio para encontrarles calificativos. Fue una jornada perfecta para todos los ciclistas: líderes, sprinters, gregarios y caídos, que cruzaron plácidamente la Bélgica francófona de Este a Oeste. Un día perfecto para ver un sprint modélico, sin condicionantes que impidieran a los mejores velocistas del mundo luchar en perfectas condiciones por la victoria de etapa. Ganó el mejor de todos, Mark Cavendish, demostrando que puede ganar sprints en el Tour simplemente en base a su descomunal talento individual.
El dato
Cavendish ocupaba la vigésima posición del grupo bien entrado el último kilómetro, como se puede apreciar en este video de Sporza del último kilómetro. Un dato impensable en los últimos tiempos con el musculoso tren de lanzadores del que disponía. En el Sky de Wiggins las cosas son diferentes y sus antes compañeros son quienes le disputan los triunfos. Pero como dice el periodista Daniel Friebe (@friebos), que levante la mano quién creía que Cavs ganaba por su treno. Guiado por su instinto llegó hasta la rueda de la pole-position, ocupada por un Greipel al que batió en un duelo por todo lo alto.
La fuga
Antes del sprint, hubo tres valientes que partieron por delante. Repitió Michael Morkov con un único objetivo, rascar el puntito que había dispuesto en lo alto de la Ciudadela de Namur para consolidar su maillot a puntos. El danés tenía asegurado mantener el maillot un día más, pero quizá empujado por estos pastelitos que le preparó la cocinera de su equipo Hannah Grant (@dailystews) se animó a ir a por más. Otro fugado inesperado fue Anthony Roux, uno de los caídos ayer, que atacó pese a tener su mano derecha inutilizada. Dos teorias de su director, el siempre impulsivo Marc Madiot, al respecto. La rabia por no haber podido disputar ayer un final “hecho a su medida” u otra más práctica: yendo en fuga, Roux se ahorró tener que usar el freno en los vaivenes típicos de circular en pelotón.
La foto
Lucir cascos amarillos de diseño discutible en favor de la aerodinámica no es la única modernez del @TeamSky. Ya sabíamos que Bradley Wiggins solía hacer rodillo para soltar piernas tras esfuerzos muy intensos, pero hoy ya hemos podido ver a prácticamente todo el equipo haciéndolo tras una etapa más bien tranquila en esta foto que ha colgado el reportero de L’Équipe Anthony Thomas-Commin (@thomas_lequipe). Como es evidente, no estaba ahí Cavendish, que andaba haciendo la rueda de entrevistas del ganador. Tampoco parece necesitarlo.
El tweet
El año pasado se metió en la primera fuga y terminó siendo el ciclista con más kilómetros en fuga del Tour, pero este año ya había anunciado que se lo tomaría con más calma y así está siendo. Hablamos de @jeremyroy, que hoy se ha permitido un juego de palabras con esta actitud más conservadora, explicando que no había apuntado (visé) a esta etapa, al ser para un sprint “ultra-previsible”.
Por cierto, Roy es otro de los que se pregunta si hay “un concurso sobre el casco más bonito del pelotón”.