Y no me refiero, obviamente, a que la joven e incipiente carrera noruega se sumiera en la indecencia. Con este mal chiste intento explicar la tremenda actuación de Antonio Piedra (Caja Rural) en la 5ª edición del Rogaland GP disputado ayer. El ciclista sevillano consiguió la victoria tras alcanzar en solitario una fuga ya establecida, dejar atrás más adelante a sus compañeros de aventura y resistir las embestidas finales que provenían, sobre todo, del equipo Garmin-Barracuda para llegar también solo al commando a la línea de meta de Stavanger. El podio lo completaban el vigente ganador de Omloop Het Nieuwsblad, Sep Vanmarcke (Garmin – Barracuda) y Simon Clarke (UniSA – Australia), que fueron los más rápidos en el sprint del cuarteto perseguidor.

La jornada arrancaba con un tiempo amenazante y fresco en la localidad de Sandnes. Sin embargo, el frío no hizo mella en el coraje de los ciclistas y desde el primer metro se sucedieron los ataques, que no tardaron mucho en fructificar. Vegard Stake Laengen (Team Type 1 – Sanofi), Kristian Forbord (Oneco – Mesterhus Cycling) y August Jensen (Selección de Noruega), alcanzados unos instantes más tarde por Oleksandr Kvachuk (Lampre – ISD) y Reinis Andrijanovs (Alpha Baltic – Unitymarathons.com) conformaban la escapada inicial de la carrera, mientras que el potente equipo americano, con la muchos de los ciclistas que formaban parte del plantel en las clásicas de pavé, buscaba apaciguar los ánimos en el seno el grupo. Aún con la fuga ya establecida, hubo nuevos saltos con la intención de anexionarse a la cabeza de carrera.

Piedra celebra su espectacular triunfo en el Rogaland GP 2012

Piedra se mostró intratable en el mojado y estrecho circuito de Stavanger / Foto: Jarle Fredagsvik

El más importante corrió a cargo de Frans-Leonard Markaskard (Team ØsterHus – Ridley), Reidar Borgersen (Joker – Merida) y Piedra, que se mantuvo a casi dos minutos del quinteto cabecero durante varios kilómetros, hasta la llegada a la primera cota del día. Allí comenzaba la demostración del andaluz, desembarazándose sin problemas de sus acompañantes y alcanzando el liderato de la prueba con gran facilidad antes de finalizar el repecho, llegando incluso a puntuar de cara a la clasificación de la montaña. Quedaban seis en cabeza con siete minutos de ventaja sobre un pelotón controlado en todo momento por Garmin-Barracuda.

La siguiente hora de competición transcurrió con normalidad, al menos hasta que la caravana puso rumbo hacia Stavanger paralela al mar del Norte. El viento oceánico comenzó a soplar lateralmente con fuerza sobre el pelotón, ocasión que no dejaron escapar los pupilos de Vaughters para “meter cuneta”. El resultado no se hizo esperar y se produjo la escisión del pelotón en un rosario de grupos diferentes, comandado el primero de ellos por el plantel de Garmin casi al completo. La diferencia cayó en picado hasta dejarla en poco más de un minuto y la mitad de los ciclistas quedaron eliminados de la lucha por la carrera. La neutralización de los americanos por parte de un grupo perseguidor a falta de 45 kilómetros del final provocó un parón para evitar echarse demasiado pronto encima de los escapados.

Ese fue el mayor error que pudieron cometer. Tras un intento del local Laengen, Piedra respondía ya inmerso en el circuito final y se iba en solitario, continuando con su exhibición. Rápidamente abrió medio minuto respecto al dúo de supervivientes formado por Laengen y Andrijanovs, que nada podían hacer ante un corredor más fuerte y eran cazados poco más tarde. Por detrás, eran los corredores de Team ØsterHus-Ridley quienes probaban con más ahínco a los favoritos de la prueba, pero los parones que sucedían a los ataques y el tan técnico como difícil trazado para el pelotón daban al ciclista de Caja Rural minuto y medio de renta a falta de 17 kilómetros para concluir.

A Piedra le restaban algo menos de tres vueltas de agonía bajo la lluvia y sobre el pavé de la capital de Rogaland para sostener a los capos que se lanzaban como lobos tras Vanmarcke, después de que el belga demarrara en pos del triunfo. Con él se iban Clarke, Stefan Schumacher (Christina Watches – Onfone) y Aitor Galdós (Caja Rural), que ejercía de vigilante de los movimientos de los perseguidores de su compañero. Aunque hubo entendimiento entre ellos, las fuerzas del sevillano respondieron pese a la tremenda paliza que habían sufrido ya sus piernas, y completó la quinta ronda en la primera posición. Ya nadie le podía quitar su segunda victoria como profesional, tras la lograda en la Volta a Portugal de 2009 con Andalucía-Cajasur. Antonio Piedra levantaba el brazo ante la mirada de Mikel Gaztañaga, que en su début como director conseguía el cuarto triunfo de la temporada para el conjunto banquero.

Clasificación final. Top 10:

  1. Antonio Piedra (Caja Rural) en 4h36’26”
  2. Simon Clarke (UniSA – Australia) a 35″
  3. Sep Vanmarcke (Garmin – Barracuda) a 35″
  4. Aitor Galdós (Caja Rural) a 35″
  5. Stefan Schumacher (Christina Watches – Onfone) a 35″
  6. Massimo Graziato (Lampre – ISD) a 48″
  7. Daniele Colli (Team Type 1 – Sanofi) a 48″
  8. Sven Erik Bystrøm (Team ØsterHus – Ridley) a 48″
  9. Håvard Blikra (Team ØsterHus – Ridley) a 48″
  10. André Cardoso (Caja Rural) a 48″