Marcel Kittel (Skil-Shimano): poca presentación exige el alemán, quien en esta temporada lleva la friolera de 12 victorias, cuatro en el Tour de Polonia. Llega muy en forma y con la responsabilidad de justificar la presencia del equipo en la salida de Benidorm. Tendrá su objetivo en las llegadas masivas viendo que todavía no ha demostrado poder rendir en etapas con finales más quebrados, como podría ser el de Totana o Córdoba.

Marcel Kittel

Alexandre Geniez (Skil-Shimano): junto con Kittel es la otra gran joven promesa de los holandeses. Su objetivo debería estar en filtrarse en fugas de etapas de alta montaña y buscar desde ahí dejarse ver en carrera. Objetivos como el de la general quizás aún le quedan grandes y este año en dos de las tres carreras que más ha destacado ha sido allí donde ha podido demostrar que sube muy bien; en la etapa de L´Ospedale en el C.I. y en una etapa de la Vuelta a Austria.

John Degenkolb (HTC): sin duda junto a Marcel Kittel una de las sensaciones de la temporada. El prodigio alemán debuta en una Gran Vuelta con la tranquilidad de haber realizado un estreno profesional sensacional. La experiencia de las tres semanas será el mayor botín que obtenga el teutón, compartir equipo con Mark Cavendish y Matthew Goss no le dejará mucha libertad de movimientos, pero seguro que gozará alguna oportunidad donde veamos el talento y calidad que posee el ciclista del HTC.

Fabio Duarte (Geox TMC): Tras la decepción que supuso tanto para él como para su equipo el temprano abandono que se vio obligado a hacer en la pasada edición del Giro de Italia, el jovencísimo corredor colombiano viene a La Vuelta dispuesto a resarcirse y a demostrar su gran nivel y lo más importante de todo, a seguir progresando poco a poco para llegar a ser un corredor que aspire a todo. El recorrido de la Vuelta le favorece mucho más que el del Giro pues éste es bastante más suave en comparación con aquel y aquí Duarte puede dejar muestras de su combatividad y de su buen hacer en la media y alta montaña. Va a ser un corredor a tener muy en cuenta las próximas tres semanas.

Taylor Phinney (BMC Racing Team): En una temporada en la que se veía como una de las grandes promesas en los sprints y en las cronos, el jóven americano de la escuela de Armstrong, viene a la Vuelta tras un año con varias lesiones que le obligaron incluso a rechazar su participación en el Tour ante su baja forma. Viene de conseguir su primera victoria en el prólogo del Eneco Tour, y parece que comienza a encontrar su forma tras varios buenos puestos en esta carrera. Si consigue estar bien y no tener percances, intentará meterse en los sprints y dar presencia a su equipo en la crono.

Wout Poels (Vacansoleil DCM): El joven holandés del Vacansoleil, será uno de los corredores que peleará por estar lo más arriba en la general, se defiende bien contra el crono y es un buen escalador. Viene de una aceptable temporada, con buenos puestos en Mediterráneo, Vuelta a Murcia, Vuelta a Polonia, y tras su victoria de etapa en el Tour de l’Ain que le valió para ser segundo en la general. Demostró venir un poco corto de preparación, pero que las primeras etapas le harán estar a un alto nivel en la montaña. Puede ser una de las sorpresas positivas, y querrá demostrar que es un corredor que puede hacer una buena general en grandes vueltas tras su retirada del Tour.

Peter Sagan (Liquigas-Cannondale): para el Bicho las presentaciones sobran, la cuestión es, ¿cuántas etapas de llevará? Viene de vencer en el Tour de Polonia donde se anotó dos etapas aunque el rendimiento dado en los Tre Valli Varesine donde su equipo se entrego a él quedando cortado a falta de un kilómetro crean dudas en torno a su figura. Debutará en una Gran Vuelta lo que hace que el esfuerzo acumulado al que no está acostumbrado durante 21 días de competición pueda pasarle factura. Pese a ello su clase y espectacularidad aseguran ser una de las atracciones de la Vuelta a España.